Ya estamos de vuelta y esta vez con una receta que os va a alucinar!!!
Sin horno, sin complicaciones, sin maquinas ni utensilio raros... Pero lo mejor es que sabe a gloria!!
Es un cheesecake súper suave y ligero con sabor a batido de fresa, con una base de oreo que combina de maravilla...
Sin duda mis amigos lo declararon como el mejor que he hecho nunca... y no les quito la razón!!!
De verdad que tenéis que probarlo una vez, y os prometo que os lo van a pedir mil más!
El ingrediente secreto y maravilloso que le da el sabor es el Nesquik de fresa, MENUDO INVENTO!
Para los que no lo conozcáis, tenéis que probarlo!! Yo solo bebo leche si es con esto, no me gusta de ninguna otra forma!
Pues bueno, ya no tiene más misterio, ingredientes sencillos, elaboración sencillísima, así que vamos allá!
CHEESECAKE BATIDO DE FRESA
Receta original: Strawberry milkshake cheesecake
(del blog: Life love and sugar)
Yo usé un molde de 26 cm, pero también podéis utilizar uno más pequeño, obviamente os saldrá una tarta más alta.
Base:
300 g de galletas oreo
30 g de mantequilla fundida
Relleno:
400 ml de nata para montar
500 g de queso crema
1 sobre de gelatina en polvo
1/2 taza de nesquik de fresa
1/2 taza de azúcar
1 cucharadita de aroma de vainilla
Procedimiento
1. Triturar las galletas oreo y mezclar con la mantequilla fundida. Repartir por la base del molde y apretar bien. Conservar en la nevera.
Para triturar galletas yo uso este accesorio de la batidora manual:
2. Mezclar en un bol el queso crema, el azúcar, la vainilla y el Nesquik de fresa.
3. Montar la nata. (Recordad que para que monte tiene que estar bien fría de la nevera o incluso en congelador) Una vez montada añadir a la mezcla anterior poco a poco y con movimientos envolventes para que no baje.
4. Verter la mezcla en el molde sobre la base de oreo y alisar la superficie con una espátula.
5. Refrigerar mínimo 5 horas. Decorar con lo que más nos guste y a disfrutar!!!!
Para triturar galletas yo uso este accesorio de la batidora manual:
2. Mezclar en un bol el queso crema, el azúcar, la vainilla y el Nesquik de fresa.
3. Montar la nata. (Recordad que para que monte tiene que estar bien fría de la nevera o incluso en congelador) Una vez montada añadir a la mezcla anterior poco a poco y con movimientos envolventes para que no baje.
4. Verter la mezcla en el molde sobre la base de oreo y alisar la superficie con una espátula.
5. Refrigerar mínimo 5 horas. Decorar con lo que más nos guste y a disfrutar!!!!